lunes, 2 de noviembre de 2009

Afán por la vida


El afán por la supervivencia se manifiesta por igual en todos los seres vivos. Vean este árbol, arrancado de raíz por un feroz vendaval, como se aferra a la vida por algunas de sus raíces que quedaron hundidas en la tierra. Después de cortar la parte superior del tronco caído, el jardinero sembró otra planta para sustituirlo, pero el árbol abatido por el viento se impuso y retoñó como queriendo decirle al jardinero, “Hey, un momento, aún estoy vivo.”
Durante un viaje a todo lo largo de la isla de Cuba pude descubrir otros muchos árboles con gran parte de sus raíces expuestas a causa de la furia ciega del huracán y que habían logrado sobrevivir en un esfuerzo supremo de la naturaleza. Desdichadamente la velocidad del ómnibus en que viajaba no me permitió obtener buenas imágenes.
Sirva entonces este ejemplo, visible en el jardín de la estación de servicio conocida como “El Conejito” que se encuentra en la Autopista Nacional entre las provincias de La Habana y Matanzas.